Drenalizedha conseguido que su rock and roll sobre ruedas vaya cuesta arriba por el sendero del metal sin caer en el desbarrancadero. Osada
maniobra que se han mandado estos franceses, puesto que venían cultivando un
rock melódico muy digerible desde su debut en el 2015 con “Destination
Everywhere”, disco que presentaba un grueso de canciones basadas en riffeos de
primera línea y fácilmente articulados para que el trabajo vocal fluya sin perder
ese compás Hard/AOR que los ha identificado desde sus primeros días. No
cabe duda que compartir cartel con referentes del heavy callejero como Diamond
Headles ha caído de maravilla, además de hacerse de un nombre en algunos
festivales europeos e ir ganando más cancha conforme alcanzaban lugar en nuevos
espacios fuera de su circuito habitual, porque para ser honestos, no es que el
hard rock melódico goce de poca acogida, por el contrario; hay mucho interés
nostálgico alrededor de su nombre. Lo que se hace indiscutible es la carencia
de exponentes que den la talla para reivindicar su legado sin parecer un remedo salido de media tabla para abajo, de todos modos; Drenalized y esta nueva producción de nombre “Edge
Of Tomorrow” acelera en segunda marcha sin miedo a quemar llanta sobre el asfalto.
Después
de una estimulante introducción titulada “2049”, llega un tema de peculiar
ingravidez. “Strangers in the Mirrors” se manifestará como eco, sonido y compás
tras el movimiento rotativo de dos guitarras que desde el arranque se muestran prestas
a dar el todo por el todo. A destacar
lo bien que alternan posiciones de ataque y defensa este dueto conformado por Julian
Angel Brunello y Max Waynn, ambas fuerzas parecen reproducir esquemas
prediseñados con rigurosidad de detalles en sus cabezas, como si estuvieran conectados psíquicamente, además se atreven a introducir figuras no usuales que
engalanan las escalas, saltándose olímpicamente las tonalidades armónicas repetitivas como en “No Miracle". Las colaboraciones en resumidas cuentas no son competitivas; sino más
bien coordinadas y en favor del óptimo desenvolvimiento
vocal de Chris Voltage, este trabajo colaborativo se hace evidente en
canciones como “Eternal Eclipse” donde Chris hace honor a sus agudos de alto voltaje al
retumbar paredes con ese chirriante trueno metálico que resuena de su garganta.
El sonido del grupo toma otros cauces en “Thirty More Seconds”, una “power ballad” impregnada de sentido romántico que relaja los oídos para ofrecer un corto lapso de distensión, porque una vez llegada “Passage en Force” se cuenta otra historia, aquí ya no existe vertientes lacrimógenas, todo vuelve cuesta arriba con este instrumental que capitaliza la atención de cualquier
seguidor del rock duro al que le afane las destrezas solistas bien programadas. Por otro lado, “Into Madness” marca un punto de inflexión desde que inició este disco, el cual ha ido desprendiendo una matriz agradable al oído, y que ahora paulatinamente se desvincula para introducir un ciclo corto de oscuridad introspectiva,
el vocalista se quita el vestuario rockstar para encarnar a un atormentado freak
de vecindario, en definitiva, un tema que bien merece ser escuchado en multiples ocaciones y desde otra perspectiva. “Fast and Lethal” y “Something to Believe In” llenan las expectativas
de sus consumidores casuales hasta dar en el clavo sincronizando su propio alfabeto rítmico al lenguaje conocido por los seguidores del rock melódico más clásico, finalmente, en “Edge of Tomorrow” el teamBrunello/Waynn sigue derrochando azúcar de sus dedos con una laboriosidad
que no tiene nada que envidiar a lo
mejor del Hard rock Británico y esa magia para captar la energia en el estudio como si estuvieran grabando una performance en vivo, ¡y con un equipo de guitarristas que se las trae!.
Drenalize es una agrupación que se siente libre de andar por nuevos rumbos, trabajando de manera honesta y sin trastabillar en su búsqueda de madurez musical que, por decirlo de algún modo, se refleja con honda soltura y espontaneidad en este "Edge Of Tomorrow”. Disco muy sobresaliente y de facil escucha que no debes dejar pasar.
Sin ninguna pretensión, sin ningún aspaviento, declaro tajantemente que nos encontramos ante un firme candidato a convertirse en el disco del año. Se trata de un trabajo con una tradición, iniciativa, contundencia e innovación envidiable, un ejemplo de cómo la música se impone a la planificación racional a través de ritmos esquivos que una vez unidos son como una tormenta eléctrica azotando tu cerebro, te será muy jodido levantarte después del impacto inicial pero los resultados son más que estimulantes.
Así se desenvuelve "Hallowed Illusions", una joya insuperable dentro del panorama Heavy Metal actual, con aspectos renovadores que demuestran su potencial artístico y con ciertas libertadespara aplicar nuevas técnicas de grabación que transmitan nitidez y transparencia al sonido, aunque este siguiendo criterios interpretativos de hace más de 40 años, tener ese aire retro no le ha hecho ningún daño. Mucha gente dirá que escuchar “Heavy tradicional” es entrar en un bucle aburrido y monótono que desde hace décadas no aporta nada nuevo. Pues yo te digo que no te llenes de comentarios estúpidos, porque elaborar música desde una perspectiva tradicionalista no impide tomar distancia de los clichés y sacudirte de las dinámicas desfasadas para aportar ingenio y personalidad. Seamos sinceros, puede que te topes con un punto de vista místico y estético semejante a Iron Angel o Cloven Hoof, pero toda esta ambientación esta conexa a un increíble olfato de composición y una holgura para introducir arreglos musicales llamativos, que sin ser extravagantes, hacen que la dinámica suene fresca sin volverse experimental ni partidaria de aquel heavy rock convencional que todos conocemos.
Imprescindible no mencionar al
hombre detrás de este trabajo, Steven Waddell sin duda un obseso por traer de
vuelta a todos los tesoros del metal ochentero bajo una sola vitrina,
encargándose el mismo de ejecutar todos
los instrumentos, interpretar todas las voces y componer cada letra del álbum.
Su intención es transmitir su pasión como quien encuentra ese álbum de
figuritas que creía perdida en algún lugar del tiempo y que una vez
redescubierta produce ese sentimiento tan catártico como entrañable. Aunque
está claro que aquí no se pretende vender nostalgia, es por ello que
convenientemente ha recibido la ayuda de Kyle McNeill (Seven Sisters/Phantom
Spell) a cargo de la masterización para así sonar lo más contemporáneo posible.
El pulso ochentero recargado se siente desde el primer momento con una avidez
desmedida que transpira speed metal por todos los poros, “Disposable” es fuerza y energía
interpretativa a raudales, el tema tiene un ritmo cabalga truenos con un
estribillo memorable, ¡para que pedir más!.Inmediatamente
después pasa a abrir fuego "Heresay" siguiendo el hilo conductor
proveniente de la New Wave of British Heavy Metal. Existe mucha variedad
rítmica y una guitarra que adquiere una elevación magnánima; su valor, la capacidad
imaginativa a la hora de ornamentar el escenario con solos de guitarra
introspectivos. "Bedsit Symphonies" es un hibrido que se
niega a ser encasillado, navega a contracorriente por los surcos de la música
funk mientras el tropel no deja de invadir las turbias aguas del metal
pesado. Difícil no sacar a relucir un acercamiento a lo hecho por los
incomparables Faith No More. Con "Stockholm Syndrome" compartimos
un letargo soft, con una instrumentación rockera clásica, esta vez el trabajo
instrumental se hace desde la base melódica, con un acercamiento hard rock que
lo hace fácilmente pinchable al gusto promedio. Los coros aportan un
aire AOR que le da el toque diferencial,un aspecto que lo vuelve atractivo al asumir
niveles de riesgo poco convencionales para un disco que arrancaría machacante y
crudo para luego demostrar ser poseedor de argumentos suficientes para
conseguir esa “pegada” comercial, y que en este disco se repite por partida
doble con "Looking Back".
Un punto a resaltar es que a pesar del empuje riffero
lleno de garra y velocidad, las canciones han sido elaboradas para ser
disfrutadas con optimismo, las letras son una reflexión musical sobre el tiempo
en el que vivimos y parte característica de los ejes centrales de esa
grabación. "Hallowed Illusions" revive las coordenadas
musicales asentadas en el speed y heavy metal, se muestra un dominio técnico de
cada instrumento con el que no resultaría difícil seguir afianzando el camino a
la construcción del estilo propio, destacando por una parte los interludios que discurren por terrenos melódicos,
aderezados con aportes que recuerdan a lo mejor del power americano, inclusive el
tono de voz es muy parecido a lo hecho por John Arch con Fates Warning. "Standing On The Edge Of The World" ha trazado un nuevo modelo de posibilidades eludiendo
las convenciones y deleitándose con la emoción de lo ilimitado estrechando
lazos esta vez con el hard rock
californiano y una que otra textura pop que dota de un especial brillo cañero al
estribillo. Poniendo punto final tenemos a “Take this Oath” un tema cadente que tiene un efecto parsimonioso
en su escucha, hubiera preferido que el disco cierre con la velocidad vertiginosa del inicio, sin
embargo; el tema levanta su desenvolvimiento con luminarios arpegios metálicos que
ponen punto y final a este ejercicio de honestidad concebida como expresión
personal deSteven Waddell.
No te contentes con ser parte de un periodo histórico
que no viviste, mejor disfruta de Oath y este "Hallowed Illusions" que
llegó en el momento justo para implosionar las estructuras tradicionales en el
heavy metal. Estamos ante una obra que estoy seguro pasará la prueba del tiempo.
Intencionalmente malsana y
desde las periferias más oscuras de Canada llega CULTIST, con un aura malévola
llena de ángulos conocidos pero con una amplitud que ya se preveía desde su
primer EP lanzado en 2018 llamado
“Cosmic Tomb”. Esta vez el mapa sonoro muestra la existencia de crecimientos
disarmónicos de choque, propiciados y mantenidos por una estructura
death metal de corte europeo ya conocido en sus anteriores trabajos y que será
la adoración de aquellos seguidores de los primeros Asphyx o de los tan
venerados Convulse. Porque es muy
evidente que este nuevo trabajo de nombre
“Manic Despair” desprende, cual
niebla fantasmagórica, un aspecto efluvio con olor a putrefacción, además hay
muchos valores distintivos que hacen más que especial a este álbum, el primero
es el trabajo impecable y despiadado de su vocalista: Vanessa Grossberndt quien
canta con una compunción que martiriza los oídos desgarrando rutinariamente la
carne descompuesta para vomitar coágulos sanguinolentos. Otro aspecto
interesante es el lírico, ya que hay un tratamiento conceptual que no se limita en crear solo odas a las
tripas y demás menudencias, hay cierta transversalidad en temas fuera del
ámbito metalero, como la capacidad reflexiva vinculada con un sentido moral y
ético aunque para el común denominador seamos justamente los metaleros los
antisociales y sociópatas por excelencia (pobres infelices prejuiciosos).
Desde que se da comienzo a este
disco con “Manic Despair” ya se siente un
halo incontenible de espesura opaca, y las metáforas espaciales del
sonido nos trasladan hacia el metal de la muerte de finales de los ochentas e
inicios de la década siguiente. Los instrumentos son medios que recorren el
naciente/agonizante páramo hacia la moderna idea de una mejora masiva con
respecto a fidelidad del audio aunque no vaya más allá de funciones específicas
de mezcla y producción.En “Synesthesia” se va soltando aquel nudo en el
apartado instrumental, la batería arranca súbita su incursión hacia la borrasca
con una re-ecualización del bombo para el ataque blast bets, el aporte del bajo
se hace constante y llamativo, lo cual rectifica la habilidad de Vanessa Grossberndt
para cantar y tocar el instrumento al mismo tiempo sin soltar el aire mientras
que sus líneas de bajo saltan y se acoplan con suma agilidad. “Vicissitudes” se gana a golpe de hacha cada pliegue de
terreno, la guitarra a cargo de Brodie Wylie y la batería con Jim Petigo se
disputan los emplazamientos palmo a palmo, una canción instrumental que
recuerda a los momentos más doomer de Asphyx combinados con la velocidad
endiabladamente thrash de los
americanos Possessed.
“Triumph” tiene el alma podrida al detalle, con una
guitarra chirriante que pareciera forzar
aquel vinculo ancestral entre el Doom
prístino y todas aquellas vertientes extremas y no tan extremas que copularon
ideas tan novedosas a finales de los 70tas. En “Missing a Soul” esta vez se le hecha tierra a las tonalidades
bajas y se prioriza el vértigo, lleno de parajes desesperantes y solos de guitarra fantasmagóricos que encajan muy bien con
aquellas letras que justamente son un reflejo metafórico de la convulsa mente de
quienes son incapaces de interpretar situaciones desde otro ángulo. Un tema
redondo y que representa muy bien las capacidades técnicas de sus componentes y
de la propuesta que se lleva a cabo, además de tener un interesante video-lyric
lanzado como single oficial para este disco.
Con “Regression” los muertos salen de sus tumbas, aquel Doom
metal que se pensaba en ruinas bajo el epíteto de la velocidad rompe el ataúd
para cogernos del cuello. Finalmente escuchar “Vexatious Seizures of
Though”es un desolador final de incontestablemente maestría que te sumerge a un
eterno invierno del alma, donde la luz del sol ha sido casi desterrada.
¡El zozobrante tramo final te congelará el espinazo!
Con Cultist el Death metal se
mantiene tan joven y tan escalofriante como en sus primeros días. La
ambientación opresiva, asfixiante y malévola es admirable, se mete en los
huesos y te hiela la sangre. ¡666 recomendable!
La banda neoyorquina de metal alternativo Helmet actuarán en Lima, Perú luego de una extensa gira europea que incluye clásicos 'Best Of' y algunos covers sorpresa. El tour llega después de la edición de su primer disco en vivo titulado 'Live and Rare' lanzado en noviembre de 2021.
Helmet es la banda clave para el desarrollo del metal alternativo noventero, contribuyó una nueva forma de entender el metal y los sonidos pesados, gracias a su popular álbum debut 'Streap It On' (1990), y dos años después, fue seguido por su obra más conocida, titulada 'Meantime'. Con ese álbum, donde cabe destacan joyas como 'Unsung' o 'In The Meantime', consiguió ubicarse entre los primeros puestos del Billbaord americano, lo que les propuso una exitosa carrera.
Desde entonces, diversas bandas reconocieron la influencia que Helmet había dejado en su música, como fue el caso de Nine Inch Nails que ya habían colaborado juntos en la banda sonora de la mítica película de culto The Crow .
En 2004 volvieron al ruedo y grabaron 'Size Matters', disco que vería la luz el año posterior. Con este retorno, y gracias a la relación del grupo con el sello de Trent Reznor (Interscope Records), los fans pudieron escuchar mas álbumes como 'Monochrome' 2006, 'Seing eye Dogs 2010, 'Death to the World' 2016 lanzados por Ear Music.
El 2021 lanzaron su primer álbum en vivo llamado 'Live and Rare' disco que reúne su basta discografía desde sus inicios en 1989 y es justamente esta obra la cual los traerá por primera vez a Latinoamérica donde recorrerán 6 ciudades como Guadalajara, Ciudad de México, Santiago de Chile, Buenos Aires, Sao Paulo y Lima.
La fecha para Perú es este 23 de Noviembre en el C.C. Barranco.
No existe marca de mayor
relevancia para un noble ingles que el escudo de armas que identificaba su
armadura, su castillo o hasta su propia tumba. Portar un emblema de este tipo no
solo representaba un título nobiliario distinguido, si no también definiría a una
estirpe de hombres únicos que quisieron vivir venciendo o morir matando. Su
razón de ser era la lucha, ese era su destino, y así intentarían alcanzar la
gloria aunque su vida fuera curtida por mil y un sacrificios. De esta misma
manera será recordado por siempre Steve Grimmett, un espíritu imbatible que
luchó por lo que más amaba: El “heavy
Metal”, guiado bajo el influjo de la NWOBHM como un distintivo forjado a
hierro en su corazón y siempre ajeno a cualquier ostentación que lo distrajese
de mantener férreamente sus tradiciones. Como no recordar clásicos firmados
bajo su nombre como “In Search of Sanity”
de Onslaught donde impregnaría su marca indeleble en un disco de vital trascendencia
para el Thrash metal, una tendencia
considerada en vías de extinción entrada ya la década de los noventa; de la
misma manera seria contraproducente dejar de mencionar a aquellas gemas del
heavy ochentero como “See You in Hell”, “Fear
No Evil” o “Rock You to Hell”, una tríada
que ocupa un lugar sagrado en la mente de aquellos nostálgicos de la edad
dorada del género y seguidores de la banda de cabecera de este famoso vocalista:
Grim Reaper. No ha sido poca la grandiosidad acreditaba a sus habilidades
vocales, en merito a ello se sostiene la vigencia de su frondosa discografía, Steve
Grimmett tenía un talento innato para la música y a nadie le sorprendería que su
nombre haya sido barajado como posible reemplazo de monstruos del metal como Bruce
Dickinson o Rod Halford. Es innegable
que alrededor de su propia figura siempre hubo esa magia, y hoy conviene valorar
también en su justa medida un disco imprescindible para comprender por qué Steve
Grimmett es una leyenda que forjo su pasión con la idea imperante del talento
predestinado a la excelencia. Prueba de ello es el disco que reseñaremos a
continuación, el invaluable y poco conocido "Chained & Desperate"
de los ingleses Chateaux.
Concebido en 1983,
"Chained & Desperate" fue tal vez la punta de lanza del sello
británico Ebony Records, quienes poseían en sus filas a la línea más cruda y estruendosa
de la NWOBHM, acrónimo de New Wave of British Heavy Metal (o mejor conocida en
español como la nueva ola del heavy metal británico). Desde sus canteras se gestarían
leyendas de renombre como Savage, Dealer o Samurai, bandas que al igual que
Chateauxempezarían sus correrías desde la clandestinidad del underground para poco después empezar un rápido proceso de
expansión hacia el mercado norteamericano con nulo, moderado o rotundo éxito según
sea el caso, y siendo el peor de los escenarios el que transitaría Tim Broughton, fundador de la banda, y compañía,
quienes formados como trio en 1981, alcanzarían cierta relevancia al año
siguiente de su formación con su primer single promocional de nombre “Young
Blood“, un trabajo que destaca por el aporte a doble turno de Alec Houston en
la voz y el bajo respectivamente, cerrando esta primera etapa Andre Bayliss en
la batería. Con la impostergable necesidad
de lanzar un primer larga duración que reconfirme su productividad, no se les ocurriría mejor idea que llamar a Steve Grimmett
como invitado especial para tan ansiado debut, precisa elección para
lo que se conoce como la primera demostración oficial del poder, garra y
carisma que iría cultivando con el pasar de los años. Muy a pesar que la
producción parece salir del fundillo, Grimmett demuestra ser plenamente
consciente de las limitaciones del medio, equiparando fuerzas con humildad sin
dejar de ser extra-normal , con unos agudos que te sacuden los tímpanos a
primera escucha.
Es un hecho que su presencia se
vuelve un faro y un reto para sus compañeros de banda,
quienes forzosamente evidencian no ser conocedores de las refinadas técnicas
que le puedan ser de acompañamiento, aunque nunca fueron deudores de la
voluntad de persistir en sus objetivos. La primera canción que abre este
disco es ”Chained And
Desperate” e inmediatamente toma contacto con la variedad de
facetas que te proporciona el rock and roll para despabilar el entusiasmo,
es una canción que sabe dar relajo sin apabullar, mientras la
estética cruda se va imponiendo con "Spirit Of The Chateaux" un himno por encima
de cualquier apreciación sesgada al gusto personal. Basta aguzar el
oído y dejarse engullir por la épica de sonidos que explota univalente con
cada rasgueo de cuerda, redoble de batería y falsete que gritado al cielo asemeja canticos de guerra que llenan de bravura los ánimos en momentos
de mayor aciago.
“Burn Out At Dawn” pertenece a la selección más pesada de este disco, desprolijo pero original
para hacerlo atractivo y relevante en una cultura primigenia que daba prioridad
a la crudeza. Rápido a una velocidad casi punk y curtido de todos los clichés
que serían la comidilla de toda una generación asentada en la península de San
Francisco y que tomaría la posta pocos años más tarde. "The Dawn Surrendered" es la balada que te pone los pelos de punta. Imposible
no emocionarse con tremenda capacidad interpretativa de Grimmett, canta con una
maestría que bien merece ser ovacionada de pie, es él demostrando a lo que
aspiraba ser en un futuro cercano, sin dejarse guiar por patrones prototípicos simplistas
y con un impecable acompañamiento instrumental tan efectivo que gira en torno a
las sucesiones de agudos y gravesque se despliegan como
espejismos tras la muralla de claridad que construye su voz. En “Straight To The Heart”las hazañas
vocales continúan al pie del cañón y toman por asalto fortificaciones de
carácter más hard rock, el dinamismo es impresionante, siendo una lástima que
la banda no haya podido mantener el nivel alcanzando por este disco, y de
alguna manera también lograr que esa conjunción de hard rock y heavy metal
vuelva a saltar la valla de las métricas sin asfixiarse en el intento.
"Baton Rouge" tiene una primera sección instrumental que corre a la velocidad del
speed metal, todavía hay una continuidad de cierto registro melódico que se escabulle
por el intrincado telón de fondo en el que brillan las aportaciones solistas.
La guitarra vuelve a estar en su mejor forma con una distorsión a decibeles exorbitantes, una cualidad que impide que temas como "Son Of Seattle" o “Shine On Forever“ puedan aspirar a tener ese guiño comercial que los motive a
cambiar lealtades, pero eso jamás ocurrió, después de su tercer disco “Highly Strung” de 1985 y ya sin Steve Grimmett en las voces (quien participaría como invitado solo en el disco debut) Chateauxterminaría su recorrido irremediablemente sin pena ni gloria, siendo inmerecido el olvido que cayó sobre esta gran banda.
Pero la carrera de Steve Grimmett
siguió adelante por mucho tiempo más, lo suficiente como para ser
testigos de las bondades que pudo plasmar su prodigiosa voz y vivir como
propios sus fracasos, sus éxitos, sus debilidades y su humanidad, aunque
su salud ya seguía un camino progresivamente doloroso. Muchos nos
emocionamos cuando lo vimos levantarse y caminar después de un
colapso que desencadenaría la amputación de su pierna derecha tras una
infección causada por la diabetes en el 2017, y si alguien te
hubiera contado que 5 meses después de este trágico suceso Steve Grimmett volvería a
levantarse para pisar un escenario, y de pie con el micrófono en mano y con su inolvidable voz haría a las
personas derramar lágrimas por él, no te lo hubieras creído, nadie lo hubiera creído, así de grande era su voluntad y
así perdurará su existencia, como una antorcha encendida en el corazón de todos aquellos que aman y viven
por lo que más quieren.
Dos de las bandas de metal más veneradas de la actualidad BEHEMOTH desde Polonia y ARCH ENEMY desde Suecia unen fuerzas para traer su gira 'The Latin American Siege 2022' este 25 de noviembre en Arena Bar. (Catalino Miranda 154 Barranco).
Actualización: Revisa los puntos de venta de entradas clic aqui
ARCH ENEMY acaba de lanzar su undécimo álbum de estudio, 'Deceivers' y trae un espectaculo cargado de potencia y calidad de primer nivel.
BEHEMOTH tiene la reputación de subir la apuesta con su show en vivo en cada salida, esta vez con una nueva producción nada menos que espectacular.
La gira 'The Latin American Siege 2022', con ARCH ENEMY & BEHEMOTH, es sin duda la última mejor gira Metal de 2022.
Entradas a la venta desde el lunes 22 en Teleticket.
POR ÚNICA Y PRIMERA VEZ LLEGA A NUESTRO PAÍS EL PRIMER CANTANTE Y FUNDADOR DE LA MÍTICA BANDA AUSTRALIANA
Dave Evans, primer cantante y fundador de AC/DC se presentará en directo este jueves 25 de agosto en Yield Rock del Centro de Lima (Jirón Carabaya 815, Plaza San Martín), a partir de las 9 de la noche. El concierto promete ser de Alto Voltaje y las entradas están disponibles general S/.50 y VIP S/. 70 (zona mesas), siguiendo el enlace https://wa.link/ckc8ow
Evans, la leyenda vida del heavy metal universal, llega a Lima en el marco de una gira mundial irrepetible con 47 fechas solo en Latinoamérica. La figura emblemática y que dio inicio al fenómeno AC/DC traerá un arsenal de grandes canciones en una reunión solo para conocedores del sonido que lo encumbró.
Dave Evans le dio vida a la primera formación de la mítica banda hasta antes de la llegada de Bon Scott. Recientemente, en declaraciones a El Clarín de Argentina, sobre su continuidad en AC/DC dijo: “Es difícil saberlo porque Scott continuó y está muerto. Pero no importa, yo sé que tengo una fantástica carrera, en la que todo lo que hago es recorrer el mundo y ver gente feliz en todo disfrutando de canciones”.
Que una banda Heavy logre alcanzar un éxito pop que
cautive a las masas no es algo improbable, en el pasado grupos como Scorpions o
Def Leppard, considerados “Heavy metal” en su momento, lograrían colarse en los
charts musicales más importantes de su época con sencillos que estoy seguro
habrás bailado más de una vez en la kermés del colegio o en el cumpleaños de
tu abuelita. Las cosas son así admitámoslo, todos tenemos un lado oscuro que
cede ante los placeres de lo popular y no hay por qué avergonzarse de ello, un
buen ejemplo de esto es el álbum que revisaremos a continuación, un pastiche
exótico que trae consigo ritmos de fuerte energía positiva un tanto alejados de
lo que se acostumbra escuchar en el circuito metalero actual, así que no
importa si eres un purista chapado a la antigua, o un entusiasta buscador de
singles rankeados en spotify, por que el luminoso pop-dance metalizado de la
banda finesa Memoremains es una invitación a brillar bajo la luz de los
reflectores o en el peor de los casos de arder en la hoguera de las vanidades
más "trues".
¿Y por qué no comenzar la reseña de este álbum
mencionando el buen tino de incluir a un instrumento que por años ha sido
marginado de las preferencias de generaciones y generaciones de metaleros por
su asociación con la música bailable?, como ya es sabido, el teclado seria
injustamente relegado al saco de los placeres culposos durante décadas, no por
nada se le recuerda como el principal causante del decaimiento del género a
mediados de los ochenta, aunque como diría el dicho "Se pasa de inocente a
culpable en un segundo" cuando se busca lapidar más que justificar una
transición natural, siendo su relevancia malintencionadamente opacada por el
dudoso afán de mantener la sagrada trinidad de guitarra, bajo y batería en su
forma más austera, no obstante; muchas han sido las ocasiones en las que el
teclado no solo ha tenido un lugar preponderante dentro de los planteamientos
de obras tan trascendentales como "Seventh son of a seventh son" de
Iron Maiden por citar un ejemplo, o de ser constructores de realidades simbólicas
únicas como las hechas en "Spiritual Black Dimensions" de Dimmu
Borgir o incluso llegar a definir la carrera de una banda como sucedería con
"Haven" de Dark Tranquillity, todos estos ejemplos
ilustran la sustancia con la que se puede materializar un sin fin de
posibilidades si se sabe utilizar los recursos en el momento y en la dosis
adecuada, algo de esta lógica encontramos en "We Are One", un tema
radio-friendly altamente contagioso, con un riff 100%
power metalero que acompaña el careo de la carismática front-woman: Johanna
Ahonen, por un momento pareciera que la banda adopta la identidad de sus
paisanos Stratovarius dándole continuidad a aquella herencia finesa de finales
de los 90, sin embargo la neo-rave "Sympathy" es una verdadera pasada
de vueltas, con su especial acercamiento a la corriente electropop de vertiente
europea que rememora a los clásicos analógicos de finales del año 2000, llegado
"Back Off" nos topamos con la típica canción que suele
gustarle a todo el mundo, es entusiasta, fácilmente tarareable y
obsesiva hasta el extremo por impulsar secuencias contagiantes con magnetismo
synth pop. "Paralyze" representa un canon definitivo
para este disco, su composición en clave de balada suena fresca sin recurrir a
la cursilería y con una evidente influencia a los mejores actos del pop nórdico
(ABBA, Ace of Base).
A "Psycho" tal vez le cueste demasiado
desprenderse de los clichés de pop sintético que pueda atribuírsele, no
obstante la canción gana fuerza al sobreponer poderosos riffs de influencia New
Metal sobre arreglos de teclado algo rimbombantes y muy parecidos a lo hecho por
Daft Punk en la cima de su popularidad. "Not My Fault" es
una canción festiva que se desenvuelve con autonomía por el extenso campo
energético de ritmos y formas, para finalmente concluir con "Empire" que cierra este ciclo
de estribillos pegadizos y secciones rítmicas explosivas que se han mantenido
firmes y constantes a través de las más variadas corrientes
electrónicas y poperas, sin abandonar, claro está, la matriz orgánica
que caracteriza al rock duro y heavy metal tradicional.
Aún si no eres de quienes disfrutan de este estilo,
te aseguro que "Pop Metal" de Memoremains no te dejará paticorto al
momento de disfrutar de su despampanante coqueteo con los ritmos pop o la electrónica, ¡adelante, no
temas! que estamos ante un monumento de irresistible pesadez con una
autenticidad a prueba de triquiñuelas prefabricadas. ¡En nombre de los dioses
del inframundo te recomiendo escuchar este disco!.
Anachronistic nos trae un
microrelato musical con un chirriante fondo posmoderno como base para la sátira política, si hablo de sátira
no quiero decir que se ha agregado unas cuantas letras graciosas a un ritmo
pegadizo con el único propósito de hacerte reír hasta que se te caiga la baba;
¡de ninguna manera!; la postura del vocalista estadounidense Matt Ramarge,
quien está a cargo de las letras de este disco, es la de parodiar las
"culturas corporativas del capitalismo" desde su experiencia de vida, esto se evidencia paradójicamente en aquel "700-19"
que forma parte del nombre del disco, justamente esta es la nomenclatura con la que un contratista inicia su proceso de habilitación comercial con el gobierno de EE.UU. según las leyes de Corea
del Sur, país en el que radica Ramargeactualmente como parte de aquella "fuerza laboral" que sobrevive con la consigna de acomodarse en la rutina menos mortífera que le permita llegar a fin de mes sin morir en el intento, un modus vivendi distorsionado con sórdido humor negro capaz de adquirir un valor ambivalente de critica y ficción a la vez; por otro lado tenemos al
multiinstrumentista ucraniano Umarlak (actualmente residente en Polonia) como
segundo y último componente de este proyecto multinacional que gracias a la proscripción de sus miembros ha podido materializar un trabajo de imperantes mensajes relacionados con los valores
individuales en la era de la crisis espiritual y el patetismo tecnológico.
"700 And 19
Ways Of Decay" es un álbum que puede llegar a captar la atención de los
forasteros de la escena crossover o de aquellos que repelen los polos opuestos por
considerarlos o "muy hardcore" o "muy metal" para su gusto, aquí las
canciones parecen ser compuestas como viejos jingles publicitarios que
recuerdan a un pasado ahora sobredimensionado bajo una óptica futurista tan
decadente que te hará reír y llorar al mismo tiempo, "Recall" es un
dejavu que rememora el momento en el que "inicio todo", como si retrocediéramos en el tiempo hasta 1970 para escuchar una versión
cyberpunk del intro de Black Sabbath, solo que en esta ocasión el tema se
desfonda hacía el HXC para no moverse de ahí hasta el final, dando relleno al maridaje exacto de metal extremo que proporcione un toque especial al sonido establecido, aunque el resultado sea sobrio en cuestión de avances fuera de la esfera ya conocida en este tipo de música. "Time to drink" es un delirio de alucinaciones alcohólicas derivada
de tendencias antisociales que fácilmente pueden bifurcar las personalidades si
eres de los que sufren de esa "ansiedad" tan común en la generación centenialls de hoy, "Late night fundraising"trae vísceras y circo para los jornaleros a tiempo completo,
¿hay algo más decadente que destruir tu calidad de vida mientras te vuelves un
esclavo de tu paladar? pues piensa en que trabajas y sabrás que cadáver tienes que comer, así de fácil.
"Going to the ball"
es la puta resaca que nadie quiere tener, es el llamamiento definitivo al absentismo laboral después de que una diarrea
fulminante termine con cualquier pretensión "Straight Edge" que pueda
conducirte al rumbo de la normalidad , pareciera que todo está preestablecido
para seguir las reglas o morir miserablemente en el camino, como lo describe
" Follow the rules or die" que
emerge de los fosos de ultratumba propios de la escena noruega,
mientras que "Hatred for work causes gout" es el colofón teatral que da fin a este revoltijo caótico de viejos
experimentos musicales y situaciones hilarantes que transforman evidencias
pesimistas en actos de autocrítica no carente de nihilismo y auto-parodia. A tener muy en cuenta la seguidilla de trabajos que se nos viene con Anachronistic ya que este "700 And 19 Ways Of Decay" es tan
solo la primera parte de una trilogía que dará mucho que hablar en el futuro.
Calificación: 7.8/10
Lista de Canciones:
01. Intro / Recall
02. Time to Drink
03. Late Night Fundraising
04. Festering Stench 05. Going to the Ball 06. Eruption of a Hork Filled Gut 07 . Follow the Rules or Die 08. Hatred for Work Causes Gout
Luego del exitoso evento de la Reunión de Masacre con la formación del emblemático Sin Piedad del 2015, muchos seguidores de la banda han esperado verlos nuevamente. Y es que muchos recuerdos pasaron aquella noche donde además presentaron una exquisita reedición de su primer álbum. Hoy luego 7 años de ultima presentación en vivo y con varias reediciones del Sin Piedad en formatos casete, CD y vinilo; se presentaran nuevamente en el mismo escenario que los vio reunidos aquella vez.
Es así que la formación que grabo el "Sin Piedad": Pierpaolo De Bernardi (batería), Miguel Tuesta (bajo), Martín Tuesta (guitarra), Coqui Tramontana (guitarra) y Miguel Angel Cervantes (voz) marcaran nuevamente una noche histórica este 27 de Agosto cuando las puertas del local C.C. Festiva del Centro de Lima se abran para los viejos y nuevos bangers del metal peruano.
Para que este día tenga la sensación 80's se ha logrado también reunir a viejas glorias del metal peruano como son los heavy metaleros de Sacra y Angelus, bandas que tuvieron un corto proceso formacional del heavy metal y del metal neoclásico limeño.
Los invitados limeños para darle variedad a este evento son: Blizzard Hunter, Estigma, Legendaria, Dangerous Project y desde Arequipa Chaska.
El metal negro escandinavo corroe con ironía sus cimientos éticos y estéticos con Katharos, este acto sueco que sobre el tropel de las almas malditas ha tomado por asalto la tradición con la firme amenaza de incendiarlo todo, lo que se ofrece aquí no es más que una pequeña parte de su infierno en la tierra, si bien esta banda no ha descubierto la pólvora, sí que aviva las brasas hasta volver cenizas los huesos, adquiriendo con esto cierta talla desmitificadora que cobra agudeza con increíble bravura y sin desligarse de lo convencional. La idea ha mejorado con el
tiempo y se visualizan objetivos mucho más claros, tras ese inadvertido debut del 2016 llamado "Exuvian Heraldry", ahora llega "Of
Lineages Long Forgotten", su nuevo álbum; con el cual adquieren un enfoque selectivo
para unir tribulaciones oscuras con arreglos melódicos y sin exagerar en lo sinfónico, el aspecto positivo es que han ganado temperamento sin necesidad de aislar ese código genético que identifica al género. Las
letanías se cumplen de un modo sectario con un fervor que posesiona cuerpos y esclaviza almas, como
es el caso de "Those Hornclad" que circula con una batería redoblante y ese rasguido a doble guitarra atávico que escapa de la monotonía con ciertas conjunciones heterogéneas. "Feigned Retreat" no guarda luto cerrado si no que expande por diversas formas diáfanas algún rezago de luz que vuelva mas llevadera la escucha, por momentos similar a los hecho por Emperor en la cumbre de su carrera.
Si agudizamos los sentidos podríamos decir que "The World Serpent's Marrow" o "I Waged War" contienen aportaciones poco extranormales para lo que uno espera de un genero que ha tenido grandes progresiones durante los últimos años, o que solo asemeja una calca a lo hecho por Dimmu Borgir; sin
embargo, su ordenamiento esta edificado bajo la agonía de los otrora referentes antes mencionados.
En resumen, "Of Lineages Long Forgotten" de Katharos es como un negro agujero bajo la luz del sol, donde no hay retoques mundanos para mantener con vida una tradición en las tinieblas.
Calificación: 7.6/10
Lista de Canciones:
01. Those Hornclad
02. Feigned Retreat
03. Of Lineages Long Forgotten
04. The World Serpent's Marrow 05. Lay Yersinian Siege 06. I Waged War 07 . Most Dread Portent