Independiente
Cada vez que escucho discos de este tipo, me convenzo más de que el metal es una fuerza indomable que arrasa con aquello que damos por inamovible. En ‘Tyrannus Aeternum’, la banda de death metal melódico Burned in Effigy, elabora once temas magistralmente retratados desde una fuente de inspiración casi inagotable.
Dentro del disco encontraremos momentos dramáticos que no recalan en ambages a la hora de soltar todo lo que tienen contenido en su interior. Para mi gusto, ‘Befouled Benefaction’ es muestra perfecta a la hora de hablar del carácter indecible del disco y de las grietas por las que se puede apreciar la perspectiva moderna. Es un tema donde se pone a prueba no solo la habilidad técnica, sino también la capacidad necesaria para sostener la paciencia melódica y comprender cuánto riesgo es necesario asumir para encontrar ese equilibrio entre corrientes alternas como el deathcore o el death metal técnico.
La banda sobradamente pasa la prueba de fuego, y con ‘Retribution’ sigue escalando bajo su propio concepto, valiéndose del eco de la sensibilidad sueca y de la hondura de sus guitarras, pero sin renunciar a añadir ciertos aportes personales que incluyen agregados neoclásicos sutilmente insinuados en un continuo emplazamiento melodeath, que a fin de cuentas siempre será forzado a cambiar el encuadre, ya sea hacia los terrenos del power como en ‘Wage of Exile’ o a la brutalidad hiper tecnificada como sucede con ‘Sacrificial Seance’. Y aquí quiero detenerme y hacer especial mención y reflejo a ‘Monstrosity Reborn’, donde se evoca un pasado que acecha desde las sombras de una génesis experimental, oculto entre capas metajazzísticas y narrativas musicales fragmentadas que no pueden terminar más que en una ruptura total del esquema tradicional.
Y como no puede ser de otra manera, este disco sigue explorando su ambivalencia con un espíritu lúdico que hace uso prácticamente de todo lo que conoce para pintarnos la cara. Desde armonías serenas y cautivadoras hasta ritmos contundentes y blast beats apabullantes, todo esto lo puedes encontrar distribuido equitativamente tanto en la blackened melódica ‘The Racking’, pasando por la sludgedeath ‘Crown Crusher’, e igual forma con ‘Citadel’. Cada una es dueña de su propio universo sonoro y hacen y deshacen a su gusto con total autonomía.
Más elogios a este disco son innecesarios cuando todo lo escuchado cumple su cometido. Cada canción se enlaza con lo más representativo que las generaciones de bandas metaleras han sabido legar a lo largo de los años. Este disco puede brillar a luz del presente, pero su fondo es tan primitivo, elemental y sincero como los clásicos de antaño. No me tiembla la mano al ponerle un diez rotundo. Se lo merece.
01. Befouled Benefaction
02. Retribution
03. Masquerade
04. Procession
05. Wage of Exile
06. Sacrificial Seance
07. Monstrosity Reborn
08. Gallows Hymn
09. The Racking
10. Crown Crusher
11. Citadel
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