Nuclear Blast
'Opera' de Fleshgod Apocalypse
es notablemente fascinante. Está plagado de pasajes secretos a lo largo de toda
su extensión. Es tan minucioso que no deja nada al azar. De él se pueden
extraer multitud de reflexiones, pues nos encontramos ante una historia que
busca la posibilidad de enaltecer nuestra humanidad incluso si nos encontramos
en nuestra 'hora más oscura'. Esta consigna gira siempre en torno a un mismo
principio: ofrecer una interpretación apasionada, fidedigna y sincera que
respete la perspectiva musical que Fleshgod Apocalypse ha cultivado desde sus inicios, y los más importante, que se
ajuste a la experiencia cercana a la muerte de Francesco Paoli, quien en el 2021 sufriría un accidente del que
casi no vive para contarlo.
Es entonces que Paoli decide montar este drama musical con la intención de que la gente fuera partícipe de lo que ocurría en su interior. De entrada hay que abrocharse bien los cinturones porque es difícil contener todo el caudal de sentimientos que proyecta al narrar la historia, y esto no se hubiera logrado sin la ayuda de Jacob Hansen, quien fue el elegido para la mezcla y masterización de 'Opera', lo cual hará brillar aún más la hoja de vida de este afamado productor nominado al Grammy. De arranque en 'Ode to Art (De' Sepolcri)' se tiene a una cantante mezzo soprano como la encargada de partir plaza, posicionándose en un lado muy acertado y evocador del cuadrante sinfónico. Asimismo, las primeras canciones del repertorio proponen un acercamiento a obras corales representativas de la música académica del período clásico y romántico. Ni que decir de la portada del álbum que muestra un estilo barroco que profundiza las conexiones musicales y pictóricas de la banda. 'I Can Never Die' tiene aspiraciones de diferente ámbito. En las menos violentas suelen ser sublimes caricias para el alma desesperada, en otras son como un hervidero de miserias humanas, un caldero donde el death metal hostil aprovecha la negatividad en ascensión para volverse insinuante según la emoción que se pretenda alcanzar. 'Pendulum' es un volcán en erupción que solo calma su magma cuando los coros angelicales salpican el áspero tratamiento musical de ese largo crescendo incandescente. Los shreds de guitarra y los solos de órgano están a la orden del día, y su intensidad serena suena simplemente abrumadora al mezclarse con un horizonte distante de atributos deslumbrantes, tal vez incluso liberadores, mientras que en "Bloodclock" el ritmo clama por una luz que no llega, siendo la canción más pesada del disco y una verdadera lección de cómo enfocar nuevas composiciones para atraer a un nuevo público. El flujo y el reflujo del prog-sinfónico se torna envolvente con una gran cantidad de detalles que coquetean con las luces y sombras de temas como 'At War with My Soul' o 'Morphine Waltz' que es una canción malsana y perniciosa, además de profunda y provocadora, asimismo; enmarca su trabajo en diversas iniciativas de arte ambiental y de conservación de su patrimonio cultural, en parte por esa vena italiana de artistas clásicos que la nutren de inspiración.
"Matricide 8.21" es capaz de hacer florecer al corredor de la
muerte de un plumazo. Es la canción 'pop'
del repertorio y la que más se centra en la suspensión armónica durante la
mayor parte de su actividad. En 'Per
Aspera ad Astra' la distribución instrumental responde a criterios
dramáticos: la parte eléctrica de bajo, guitarra y batería es la tormenta que
ahoga al doliente, el apartado sinfónico ambienta la escena (como ocurre en Tosca: Te Deum, de Puccini) con una emoción genuina que raya en una especie de
epifanía, la soprano se ocupa de la parte espiritual (de los sentimientos y la
concepción de la naturaleza y la vida en sí). ¡Y como no podía ser de otra manera!, 'Per Aspera ad Astra' es el inicio de una
suite clásico-romántica magníficamente orquestada para dotar de atemporalidad a
'Till Death Do Us Part' y así
terminar por dar fin a la gran sinfonía fúnebre pero triunfal de 'Opera', con su infusión mítica de piano, que al mismo estilo que los órganos de las catedrales, cierra uno de los momentos más
trascendentales en la carrera de Fleshgod
Apocalypse.
'Opera' es una obra que parte de una estructura personal que se 'materializa' mediante diversas disciplinas (música, poesía, pintura, performance teatral, recursos audiovisuales) para conseguir restablecer un contacto firme con la realidad, ensalzando la imagen de la muerte como un proceso al que no hay que tenerle miedo, y promoviendo una existencia plena de gozo, a través, de uno de los discos más vanguardistas de los últimos tiempos.
Lista de Canciones:
05. At War with My Soul 06. Morphine Waltz 07. Matricide 8.21 08. Per Aspera ad Astra 09. Till Death Do Us Part 10. Opera
Publicar un comentario