El metal extremo debe ser el que más seguidores (no tan fieles) tiene la escena local, sobre todo compuesta de aquellos bangers que crecieron disfrutando de las bandas clásicas y pioneras de los estilos más pesados del Metal como lo es el Death Metal y sus variables. A comienzo de los 90s aparecieron las mejores bandas del género, quienes nos dejaron un buen puñado de clásicos que aún hoy en día suenan vigentes. En esta oportunidad teníamos por tercera vez a una de estas bandas pioneras, los estadounidenses de Suffocation, quienes pudieron saciar el apetito de brutalidad y técnica de aquellos que disfrutan del estilo más extremo  dentro del abanico inmenso que es el Metal. Como en anteriores visitas, los estadounidenses no decepcionaron y supieron darnos lo mejor de su artillería el pasado Domingo 24 de Setiembre. Como para ir molido a trabajar al día siguiente, razón por la cual una vez recuperados, queremos compartir esta humilde reseña sobre el intenso concierto del fin de semana.


La discoteca The Blood fue el escenario de la devastación, escenario apropiado para este tipo de eventos entre los pocos espacios que tenemos para los conciertos (cortesía de los "meones" y borrachos que nunca ingresan a los conciertos) En esta oportunidad fueron cinco bandas, incluida una brasileña y una ecuatoriana quienes fueron los encargados de empezar la masacre. Cada banda se esforzó por dar lo mejor y animar a la gente para armar el pogo, a pesar que al principio era poca la cantidad de asistentes, quienes al parecer fueron especialmente a ver a los estadounidenses.


Los nacionales de Maestro Caníbal tuvieron la difícil tarea de empezar cuando muchos aún seguíamos afuera. Esta banda va más por el sendero del Grindcore / Hardcore, cuentan con 2 vocalista que se turnaban para escupir con furia letras contestatarias. Ellos tienen un disco lanzado hace poco a través de GOHb, "Víctimas de nuestra propia ignorancia",  según vi, es el primer álbum en 16 años. Buena presentación de no ser por la gente que aún no se enganchaba del todo o seguía esperando a Suffocation.


Desvirginizagore, fueron los siguientes en salir al escenario. A esta banda de brutal death metal los he visto en varias oportunidades, pero esta fue la primera vez con esta formación. Ronnie Demoledor en las voces empujó a la gente a moverse y armar un pogo. Al baterista Joe Hoyle también lo he visto en otras bandas, muy bueno por cierto. La banda no se guardó nada y logró encender esa fría noche.


Seguía Infection, banda que vuelve a la actividad después de mucho tiempo. Ellos tiene un disco también lanzado a través de GOH. El álbum "Acrotomophile Mutilator" con un logo difícil de entender y una portada muy fuerte. El disco suena muy bien y en vivo no me decepcionaron, excelentes guitarras y buenos guturales. La banda supo agradecer a quienes animaron el pogo con unos ejemplares de su álbum.


El turno de las bandas internacionales llegó y las primeras en salir fueron las brasileñas de Sinaya. Su setlist principalmente conformado por temas de su EP "Obscure Raids". Esta vez llegaban con nueva baterista, Cynthia Tsai. Desde que llegaron para el Lima Metal Fest por primera vez, nos han vuelto a visitar en 2 oportunidades si no me equivoco, y por lo visto siguen creciendo. Bastante técnicas y orientadas más al Death Metal.A ellas les siguió Epidemia de Ecuador quienes ya nos habían visitado años atrás junto a Monstrosity. La banda dejó todo en el escenario aunque quedaba claro que los asistentes se estaban guardando para los estadounidenses. Aún así me gustó mucho su presentación.


En este punto me parece adecuado indicar y sin ánimos de faltar el respeto a las bandas, que para conciertos de día domingo o día se semana, no debería habar demasiados teloneros, ya sabemos lo difícil que resulta empezar temprano, sobre todo porque tenemos la mala costumbre de llegar tarde y encima al día siguiente debemos madrugar al trabajo. Creo que ese tema jugó en contra a las bandas que abrieron el concierto. Por otro lado este tipo de eventos, en locales como pequeños como The Blood y con bandas que que a pesar de su trayectoria mantienen su humildad, nos permiten tener contacto con los músicos y poder saludar e incluso tomarnos una foto con ellos. Pude ver cómo Terrance se dio el tiempo de escuchar a las bandas teloneras, recibir de buena manera a los fanáticos que se acercaban a saludarlo e incluso tomarse foto con muchos, y todo de manera ordenada sin que la gente se amontone. 


Y llegó lo que todos esperaban, Suffocation, uno de los pilares del Brutal Death Metal, con clásicos como el Effigy of Forgotten. Debo reconocer que era la primera vez que los veía en vivo así que lo disfruté mucho a pesar que ya no sale de gira Frank Mullen la voz original y una de las más brutales del estilo, esto debido a que como sabemos la música no es rentable y ha decidido dedicarse más a su familia y su empleo forma, cosa que se respeta aunque se le echa de menos. A pesar de todo, creo que Kevin Muller ha sido un acierto, su voz calza muy bien con el estilo, tiene presencia en el escenario y en todo momento nos invita al pogo, hasta me pareció que su voz es incluso más grave que la de Mullen, de lo mejor de la noche sin duda sus guturales. Otra tremenda baja fue la de no contar con el bajista Derek Boyer en este caso por un tema de salud. Así que la banda salió al escenario como cuarteto con el siempre preciso y único miembro original Terrance Hobbs llevando todo el peso de la banda consigo, Charles Errigo en la otra guitarra y Eric Morotti encargado de la metralleta. A pesar de estas ausencias, Suffocation supo dar cátedra repasando en una corta presentación su notable discografía con temas de su última placa "Of the light", pasando con clásicos como "Effigy of the forgotten" o "Pierce from within". Corta pero intensa presentación donde supieron aplastarnos con su avalancha sonora a pesar de las notables ausencias. Este es un estilo para disfrutarlo en vivo, una verdadera máquina bien aceitada. Brutal y precisa presentación que esperemos no sea la última. No faltará quienes critiquen las ausencias y lo usen como pretexto para justificar su asistencia pero ese día se vio a los verdaderos fanáticos de la banda .