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Los alemanes de Lord Of The Lost presentan su séptimo álbum de estudio en el cual han desarrollado, a través de un álbum doble, toda una narrativa en torno a un personaje controversial e interesante como lo es Judas Iscariote, el apóstol traidor según la biblia cristiana. Un personaje que puede ser analizado desde diferentes puntos de vista, como menciona la banda, desde la interpretación del mismo como redentor, mártir o asesino, sumado a los textos apócrifos del "Evangelio de Judas" que narran una conservación entre el discípulo y el mismo Jesucristo, sirven como la base para desarrollar el concepto de este álbum doble bajo los títulos de "Damnation" y "Salvation" con un total de 24 canciones donde la banda nos sumerge en la oscuridad de su música, donde siempre encontraremos elementos de Rock, Metal, Industrial y algo de Gótico. Este disco vendría a ser el sucesor del exitoso "Thornstar" (2018) y es posiblemente su álbum más ambicioso a la fecha, algo que podemos notar en la gran cantidad de detalles que hay en las canciones.

La primera parte, "Damnation", inicia con "Priest" una canción que nos entrega coros desde su inicio con mucha percusión antes de que ingresen las guitarras distorsionadas y se convierta en un medio tiempo será la constante en casi todo el álbum, siendo una canción con cierta pesadez y sonidos algo industriales sobre todo en el coro, siendo Chris Harms quien destaca con su sentida interpretación desde las líneas iniciales casi recitando, pasando por los estribillos melancólicos y las voces más guturales sobre el coro. "For They Know Not What They Do" está hecho para ser un sencillo, siendo muy accesible desde su inicio con grandes coros, nuevamente la voz entrega una sentida interpretación tanto en partes lentas como en las pesadas haciendo uso de guturales que crean un agradable contraste, acompañado por hermosas melodías de teclados. La melancolía continúa con "Your Star Has Led You Astray" y sus teclados que contrastan con un fondo más industrial por parte de las guitarras. "Born with a Broken Heart" apela nuevamente a los coros que le dan un aire bíblico al inicio antes de arrancar con fuerza una de las mejores composiciones pues posee un coro muy emotivo en una de las canciones más directas o pesadas del álbum. Los sonidos de órganos de iglesia y sintetizadores de "The 13th" nos entregan otro momento sentimental e inspirado del disco junto a "In the Field of Blood" y "2000 Years a Pyre" que poseen algunos de los coros más hermosos de este trabajo además de tener coros de voces que acompañan de forma notable y una de las partes más intensas en este último previo al solo. Hacia el final del primer disco abundan "baladas" como "Death Is Just a Kiss Away" que es algo minimalista y apela a coros y sonidos de órganos de iglesia, "Euphoria" por su parte ofrece algo más de peso a nivel instrumental y un sentido solo de guitarra, mientras que "The Death of All Colours" apela a la expresividad y melancolía de la voz de Harms quien acompañado de epicos coros logra una sentida interpretación. "The Heart Is a Traitor" y "Be Still and Know" rompen y dan algo de variedad al tranquilo final del primer disco pues son canciones con mayor distorsión combinado con pasajes más calmados o melancólicos, sobre todo en el segundo que es instrumental.

El segundo disco, "Salvation", inicia con mucha fuerza pues "The Gospel of Judas" se inclina más por los Industrial y se apoya en coros que destilan poder mientras que los estribillos destilan mucho sentimiento en una de las mejores canciones de esta parte. Algo más teatral nos llega con "Viva Vendetta" aunque el coro destila mucha fuerza. Nuevamente tenemos una voz femenina muy pegadisa y dulce en "Argent" siendo una canción que apela a lo electrónico y el Rock para desarrollar otra canción muy sentimental en su coro. El lado más accesible continúa con canciones como "The Heartbeat of the Devil", "And it Was Night" e "Iskarioth" que mantienen el buen nivel de lo escuchado hasta ahora siendo himnos de la melancolía, sobre todo el último que tiene un gran coro. Al igual que en la primera parte hay temas más lentos, algunos minimalistas como "My Constellation", otros más pomposos y sinfónicos como "The Ashes of Flowers". Mención especial a "A War Within" cuyos sintetizadores suenan hipnotizantes mientras que la voz nos entrega una de sus mejores interpretaciones, cargado de mucho sentimiento tanto a nivel vocal como instrumental, algo que podemos seguir disfrutando en "A World where We Belong". Al igual que en el primer disco, aquí el final llega con "Work of Salvation", nuevamente más reposado y tranquilo, cargado de elementos sinfónicos y que apela a la voz acompañada de coros para entregarnos mucha emotividad.

Ambos discos suponen un trabajo monumental a nivel de música y letras, con cada escucha encuentro nuevos detalles y se nota que hay un gran trabajo a nivel instrumental aunque bien liderado por la voz de Harms quien se roba el show en más de una oportunidad. Quizás se excedieron en la cantidad de canciones lentas, no son malas en lo absolutos, sin embargo llega a saturar, aunque entiendo que la música acompaña las letras e historia detrás del álbum y en ese sentido sí logran darle teatralidad, dramatismo y mucha emotividad a lo largo del disco que es lo que requiere este concepto sobre Judas. La gran cantidad de coros, arreglos sinfónicos y el uso de sonidos de diversos estilos de gran forma hacen que uno disfrute más el disco con cada escucha. Un disco que dudo decepcione a los seguidores de la banda y que disfrutaran aquellos que gustan de la melancolía y oscuridad.