CD digipack por Eternal Juggernaut Records; LP por Eternal Juggernaut Records, Kremón Records, Catábisis Records, Hecatombe Records, Lost Merch, Brutal Arratia Records, Cruzade records; MC por Lost Merch.
Hay muchas bandas dentro del mundo hispánico que pueden llegar a volarte los sesos, unas más que otras, el caso es que desde España nos llega gracias al patrocinio de Blood Fire Death lo nuevo de los catalanes ÓSSERP, banda que destruye todo a su paso ni bien pones a girar el disco. Con un brutal logo y una portada más que estupenda (hecha por el italiano Paolo Girardi) donde se ve al dios mitológico Sibila abriéndose camino sobre el pandemonium, con un sonido que nos transportará a un caos tan horrendo que solo puedes atinar a acoplarte a ello o sucumbir al embate brutal que te espera.
Ósserp son: Vali (voz), Xavier (Voz), Ben (guitarras) y Alex (batería) y presentan su tercer álbum de estudio, al que le han dedicado mucho trabajo, porque no existe mayor halago que superarse a sí mismo y pienso que con este disco lo han logrado, se siente una atmósfera donde el death metal toma vida y el grind death se confabula con el arte negro para brindarnos un espacio mísero lleno de pasajes desgarradores donde suplicaras clemencia ante las descargas fieras de metal extremo que te rasgarán la piel hasta sangrar.
Ósserp banda fundada en Barcelona en el 2012.
Este álbum suena parejo con una técnica variada de géneros que es comparable con bandas de gran talla, lo destacable es que han conseguido algo primordial dentro de la escena metalera extrema; y es vivir y sentirse parte de cada historia, porque la música es también un vehículo importante para propalar sensaciones y la banda ha dado en el clavo con lo que quiere transmitir. Els nous cants de la Sibil·la contiene nueve temas que tratan sobre la insignificancia del hombre en el universo así como también sus desventuras, cada tema esta enriquecido por ciertas introducciones industriales y ritmos hardcore que son muy bien aprovechados como en 'El pes del built' o la impecable armonía oscura que hay en 'Lluna negra'. Esa amalgama de ritmos hace que te mantengas atento y no te pierdas ni un segundo de este viaje apocalíptico que dura casi tres cuartos de hora. Hay secuencias donde el grind core toma caminos despicados para mantenerse vivo con unos guturales molestos, enfadados que curiosamente saltan entre brutalidad y sosiego, esa impactante combinación de voces es de lo mejor del disco. Temas favoritos: 'El pes del Built', 'La remora'.
