El metal negro escandinavo corroe con ironía sus cimientos éticos y estéticos con Katharos, este acto sueco que sobre el tropel de las almas malditas ha tomado por asalto la tradición con la firme amenaza de incendiarlo todo, lo que se ofrece aquí no es más que una pequeña parte de su infierno en la tierra, si bien esta banda no ha descubierto la pólvora, sí que aviva las brasas hasta volver cenizas los huesos, adquiriendo con esto cierta talla desmitificadora que cobra agudeza con increíble bravura y sin desligarse de lo convencional. La idea ha mejorado con el
tiempo y se visualizan objetivos mucho más claros, tras ese inadvertido debut del 2016 llamado "Exuvian Heraldry", ahora llega "Of
Lineages Long Forgotten", su nuevo álbum; con el cual adquieren un enfoque selectivo
para unir tribulaciones oscuras con arreglos melódicos y sin exagerar en lo sinfónico, el aspecto positivo es que han ganado temperamento sin necesidad de aislar ese código genético que identifica al género. Las
letanías se cumplen de un modo sectario con un fervor que posesiona cuerpos y esclaviza almas, como
es el caso de "Those Hornclad" que circula con una batería redoblante y ese rasguido a doble guitarra atávico que escapa de la monotonía con ciertas conjunciones heterogéneas. "Feigned Retreat" no guarda luto cerrado si no que expande por diversas formas diáfanas algún rezago de luz que vuelva mas llevadera la escucha, por momentos similar a los hecho por Emperor en la cumbre de su carrera.
Si agudizamos los sentidos podríamos decir que "The World Serpent's Marrow" o "I Waged War" contienen aportaciones poco extranormales para lo que uno espera de un genero que ha tenido grandes progresiones durante los últimos años, o que solo asemeja una calca a lo hecho por Dimmu Borgir; sin
embargo, su ordenamiento esta edificado bajo la agonía de los otrora referentes antes mencionados.
En resumen, "Of Lineages Long Forgotten" de Katharos es como un negro agujero bajo la luz del sol, donde no hay retoques mundanos para mantener con vida una tradición en las tinieblas.
Calificación: 7.6/10
Lista de Canciones:
01. Those Hornclad
02. Feigned Retreat
03. Of Lineages Long Forgotten
04. The World Serpent's Marrow 05. Lay Yersinian Siege 06. I Waged War 07 . Most Dread Portent
En el principio era el caos, fue el origen de todo, lo primero que existió, y por más que la humanidad quiso conocer cuáles eran los mecanismos y leyes que rigen su sentido, aquellas verdades fundamentales siempre fueron excluyentes a sus capacidades. Mucho tiempo nos tomó comprender que el mundo está a la deriva y en potencia constante de volver a ser “cosmos”, de diluirse a través de diversas formas dentro de la nada, hacia la ausencia de luz que precede a las grandes transformaciones, a pesar de todo esto, estúpidamente creemos que las sociedades son los únicos sistemas capaces de oponerse a esta sentencia; ilusión patética; porque aunque el orden ya este impuesto, es la naturaleza quien define su tendencia hacia la deconstrucción del mundo y por consiguiente de los seres que lo habitan. Si piensas que todo lo que nos rodea está precedido por la perfecta armonía, hoy la dispersión de la energía en su forma más degradada será una antítesis del orden desde el orden mismo con esta piedra angular de brutalidad filosófica llamada "Kaosmos", último lanzamiento de la leyenda sudamericana de metal extremo Reencarnación, quienes desintegran al sujeto para fundirlo en algo "más grande que su propia oscuridad".
Un ejercicio de igualación de
fuerzas es como lo describiría Víctor Raúl Jaramillo "Piolín" en una
reciente entrevista en donde pone de manifiesto el carácter transgresor del
concepto, sumado a aquel sonido de tradición bastarda que los ha identificado a
nivel mundial todos estos años, "Kaosmos" es un álbum colaborativo
que te invita a enloquecer en un espacio aparentemente lleno de lógica, su
estructura es un devenir de latencia constante en el que los aportes individuales de Kayphaz
Balephar (Guitarra), Martín David Naranjo (bateria) y Laura Corrales (bajo) conforman
un prisma triangular de contraplanos y
nuevas interpretaciones musicales bajo el halo implacable de Piolín, quien
consagra música y palabra como en "Kaosmos I", un discurso preñado de
sentido que se desvanece en la búsqueda de equilibrios, poco después se revela la existencia de fuerzas que
pueden romper la estabilidad del sistema, "Kaosmophagia" posee un sonido
convulsivo que rompe el claustro sin leyes marciales que lo detengan,
tan punk como metal, "lo mismo distinto" en su omisión de roles específicos.
"Kaosmophobia" tiene una carga lírica que te
conecta a otras realidades, inclementes, turbulentas, dañinas, todas reconducidas al subconsciente y depositadas allí con una furia “powerviolence” que bien podría
ser un epítome del caos que el espacio social representa en la actualidad.
"Kaosmolombia"
es una hermosa pieza de exploración desde la pluralidad instrumental, un eterno
retorno al orden, a la armonía necesaria para salvarnos de la confusión, un
acto de fe tan mundano como humano que busca perpetuar el lado bueno de las
cosas. No obstante; y para millones y millones de seres humanos, el verdadero
infierno es la vida y "Kaosmosophia" es prueba de ello, en un mundo
donde lo sagrado ha sido destruido y no queda otro objetivo más que la búsqueda
de la supervivencia no existe mayor código de interpretación que el fatalismo
construido con guturalidad y cinismo hiperbólico.
Esta producción tiene el estigma de ser portador de suciedad y la radicalización de los ritmos hacia un terreno más "Death Metal" dan como resultado un corte devastador como"Kaosmotin" un llamado a la conciencia de aquellas vidas claudicantes que luchan por
existir y existen para luchar, actores de la comedia humana que optarán por una
u otra vía antes de convertirse en desechos humanos si no se deciden a rebelarse contra el status quo. La
nitidez de las líneas fronterizas entre "Kaosmophilia" y
"Kaosmos II" se volatilizan,
la matriz de la que parten sus estridencias tienen un carácter cognitivo
que ayuda a asimilar grandezas tan inexistentes como la certidumbre o la permanencia, con el movimiento como único destino posible
en este viaje lisérgico hacia el existencialismo de la nada.
Reencarnación ha creado con "Kaosmos" una entidad igual de caótica y cósmica que la existencia misma, donde coexisten principios turbulentos en permanente guerra por contradecir lo cotidiano con inexpugnable bestialidad. ¡888% recomendado, una obra maestra!.
Lethargic te volverá protagonista de tu propia historia de
horror con este disco provisto de una fe oscura y casi ritualista hacia el legado de los amos del Death y Doom metal más antiguo, y es que las formas
de entender los miedos primarios del ser humano no desaparecen, se adaptan
a los medios para construir nuevas narrativas, como antes lo hizo visualmente
el cine de horror, con el aporte de grandes maestros de la talla de Ruggero Deodato, Darío Argento
o George Romero; esta vez la agresividad extrema de "Woodoo Tumba", nuevo disco de Lethargic, funge de exordio tras caer
la noche para soterrar las tumbas de lo espeluznante; con un repertorio que será pura carnaza para la bestia que llevamos dentro.
Y es que no había previsto formar parte de ese juego de sonidos vulgares que distorsionados se transforman en figuras diabólicas en mi mente. "Decúbito Supino" fortifica ambientes oscuros con un nervio inquietante,
su escucha se vuelve un "survival horror" de acciones de arranque
imprevistas, momentos de zozobra con instrumentos que se recortan sobre un
fondo sucio y denso que amplifica aún mas esos gritos de perfil sádico, por momentos burlescos al combinarse con risas enfermas que viran hacia lo bizarro. La introducción de
"Seres Que se Arrastran"es un
presagio de ruindad y miseria sin dejar de producirnos espanto, con una fuerte influencia sudaka y cultivadora de artes profanas similares a las hechas por bandas como Toxodeth o Mortuary, solo que
aquí el idioma español es la matriz lingüística para estas ficciones
que escupen rapsodas de ultratumba como en "Psychophonie 1 (Ouija Exploración)", una introducción que te invita a cruzar la puerta de lo desconocido, al reino donde la muerte gobierna, hacia aquel "Ambiente Fúnebre", en donde la única forma de salir es por pedazos, es increíble como se puede hacer tanto con tan poco, una guturalidad cinco estrellas y un apartado rítmico que vislumbra ciertos toques armónicos de estructura compacta que brinda mayor significado no sólo a la ausencia de vida, sino también al dolor tortuoso.
"Lápida Pozo" comienza casireptante sobre el fango de la superficie para luego alzar vuelo con una transición Doom/Hardcore a lo Corrosion of Conformity, tras otra breve introducción: "Amor Necroftalmológico" es la cara más sórdida de la existencia, contada con un
realismo tal que supone una ofensa para la moral. La realidad es la realidad y
la magia del gore es crear una ilusión, allí radica su embrujo, en sobrepasar
los límites de lo correcto como en "Meare sobre tu Fosa".
"Woodoo Tumba" es el punto final para este horrendo y extraño ritual
antiguo de contenidos obscenos y sórdidos hasta la máxima expresión, Óscar G.
Comendador es el arquitecto tras esta performanceque usala violencia como eje central de su retorcida expresión, todo cuenta con las dosis exactas para generar un impacto
grotesco, bizarro y extrañamente perturbador al mismo tiempo.
Un disco que no puede ser condenado al ostracismo, aléjate
mientras puedas porque con Lethargic solo obtendrás sangre a borbotones. ¡Escucha obligatoria!
Sensory
Amusia parece que ha encontrado una manera de sopesar los pros, los contras y
las consecuencias remanentes de hacer metal moderno en una época en que la evolución
es la consigna. Aunque a veces esto
conlleva a conceptos que no se quieran comprender por pura majadería, explicándome mejor; ya es tiempo de tomar en
serio a las entidades que pululan a nuestro alrededor sin reparar en estereotipos,
por que cabe la posibilidad de contemplar una especie biológica de pocos
ejemplares en su tipo, y para rarezas nada mejor que Australia y esta banda que
ha decidido mandar al carajo la estandarización de su música con el lanzamiento
de "Breed Death" su más reciente trabajo a la fecha, una ramificación
que se aleja de ese cyber core
industrial de "Disrepair", su álbum debut que, mal que bien, significaba
el eslabón de pasantía para lo que vendría después.
Ahora han logrado deformar
su existencia de una manera grotesca valiendose de la canibalización de sus
influencias, hay un desmembramiento particular de los hecho por Dying Fetus por
ejemplo, te darás cuenta de esa sensación de intensidad rápida del hardcore, como en "Birth Through
Violence" que introduce la necesidad de desprenderse de su antigua coraza
industrial con un ingreso así de rápido y fugaz. Inmediatamente después "Yersinia Pestis" revela un apetito sanguinario por prácticas brutales
y ultra técnicas, en cierta forma destila la misma vivacidad grácil de “Hiroshima
Will Burn” aquella pandilla de jóvenes superdotados que nos regalaron una obra
maestra llegando casi a la primera década de los dos mil. La fáctica demostración
de brutalidad Djent es excelsa, no
hay duda de eso en mi opinión, a no ser que exista alguna organización
internacional de estándares de brutalidad que la pueda calificar, puede que
para el metalero común y silvestre sea ligeramente diferente a lo que está
acostumbrado a escuchar, pero esto no
implica necesariamente que sea de mala calidad, al contrario, muchas veces
suele indicar un mejoramiento continuo a lo ya conocido, como en "Vermin"
donde se desgrana de una forma colosal el deathcore, la vieja escuela del death
metal y aquellos toques futuristas que recuerdan las odiseas cósmicas de Erik
Lindmark. "Parasitic Alteration" es un ejercicio de coordinación
espontánea que te lleva por caminos
donde lo grotesco se convierte en un
polo de tensión constituido por un
lenguaje musicalde devenir inhumano.
"Vulgar Thoughts Of Carnage" es un segundo embate de guerra, los
medios tiempos abundan dando una base híbrida de profundidad. Esta vez los
ambientes etéreos han caído en buena tierra, alejándose completamente de aquel
sonido de metal industrial americano que no sumaba para nada. En “A Blank
Canvas Of Flesh" hay una serie de ritmos enfrascados en una disputa donde
la intromisión invasiva del black metal impide que se forme aquel coágulo
sanguinolento , los shriek y pig Squeals son como cuchillas que no harán
más que producirte una hemorragia incontrolable, tal vez el tema más potente y
mejor trabajado del disco, para terminar "Breed Death" es un tema que
cumple y se las ingenia para dispersar en un intervalode 5 minutos una obra teñida de copiosos
actos modernos de una calidad envidiable.
Concentrándonos en las definiciones, tenemos un disco deathcore del tipo brutal death metal técnico con breakdowns y variantes de tempo en
constante movimiento al cual considero un engendro extremadamente peligroso y
extraño; pero no por ello menos interesante. ¡Muy recomendado!
Calificación: 7.9/10
Lista de Canciones:
01. Birth Through Violence
02. Yersinia Pestis
03. Vermin
04. Parasitic Alteration 05. Vulgar Thoughts Of Carnage 06. Bind, Torture, Kill 07 . A Blank Canvas Of Flesh 08. Breed Death
Escuchar "Beyond The Macabre" de los suecos Paganizer conlleva
serias consecuencias, esto debido a su intención de hacer añicos las mentes
polarizadas. Si eres de los preponderan melodía por encima de la pesadez, te
vas a dar de cara contra la pared, porque
se impone desde el principio un ritmo demoledor que va camino a pulverizar los
registros sonoros de los no alineados al trabajo de Rogga Johansson, líder de
esta banda sueca de largos 28 años de carrera.
Así que por tu bien te recomiendo que tomes tus precauciones, si te
aturdes fácilmente hasta por el ruido que hace tu garganta al pasar el agua,
entonces es posible que este disco te produzca ansiedad, el motivo: la melodía
en su mínima expresión es asediada hasta el hartazgo por instrumentos que
parecen armas vivientes enfrentadas entre sí en una lucha de vida o muerte, si
por el contrario; eres amante de los sonidos malsanamente brutales, la cuota
melódica será como ese mosquito zumbón que deseas aplastar hasta volverlo
papilla entre tus dedos. Es verdad que en " Beyond The Macabre" las partes
melódicas no tienen largo alcance, pero esto no impide que su resolución encaje
en un sonido sueco reconocible.
Las exhalaciones ponzoñosas de Rogga parecen
salir de los pantanos del decaimiento, "Down The Path Of Decay" es en
donde la marea del alma va bajando más y más hacia lugares complejos y de alto
grado de infestación. “Left Behind To
Rot”, es un martillazo destructivo, inclemente y eficiente, Kjetil Lynghaug,
hace de las suyas y demuestra el competente nivel de concordancia que puede
llegar a tener con Rogga, una especie de afinidad entre correligionarios para
hacer de sus mentes una hoguera de vanidades, no por nada ambos han unido
fuerzas para sacar adelante otro gran proyecto llamado Ribspreader y que pronto
será reseñado en las páginas de Dargedik. "Meatpacker" permanece
suspendido entre las influencias de Napalm Death o Benediction, sin dejar de
lado la personalidad que define a la escuela sueca para proyectar, dispersar o
pulverizar los decorados nítidos, un tema muy directo y que sirve como palanca
para "Sleepwalker", que es como el veneno que viaja por la sangre del
moribundo, rápido y letal. Su interpretación flexible tiene espacio para la
armonía, que se desprende de la guitarra a su vez que realiza un contrapunto
con ella brillando en tenues solos melódicos. "Succumb To The
Succubus" sigue con la inexpresiva voluntad de reincidir en el ataque a
los pilares de la mesura, su mala saña agobia con estridencia, aunque detrás de
los ritmos persistentes existe un no-continuum con la espectacular "Raving Rhymes Of Rot", nada más demoledor que el acertado manejo de los tiempos y esa
textura granulada que por un lado es áspera y por el otro liza, un complemento
majestuoso armado de sustanciales coros de marcada sensibilidad que no
abandonan los matices cavernosos, llevando forjado a fuego en su empuñadura la indiscutible marca
de Gotemburgo.
“Menschenfresser”
le da vuelta al funcionamiento ordinario, su movimiento conecta con un groove
pegadizo y reconocible, para poco después reorientarse al impacto frontal
que causa la potencia y el desenfreno. Se da por finalizado este disco con
"Unpeaceful End" bajo las órdenes de la todopoderosa guitarra y su
atípico lineamiento que se aleja de la estructura armónica fija y la velocidad
endiablada para presentarnos el ocaso de una bestia compleja que agoniza
sufriendo sensaciones sombrías, un tema que cuenta con la participación
especial de Karl Willets de BOLT THROWER.
Podríamos decir que "Beyond The Macabre" de Paganizer se enriquece por si misma con imprevistas aleaciones que le
confieren una velocidad alucinante y una impiedad que te pateará el hocico con
implícita malevolencia. !666% recomendado!.
Calificación: 9.5/10
Lista de Canciones:
01. Down the Path of Decay
02. Left Behind to Rot
03. Meatpacker
04. Sleepwalker 05. Succumb to the Succubus 06. Raving Rhymes of Rot 07 . Beyond the Macabre 8. Menschenfresser 9. You Are What You Devour 10. Unpeaceful End
Así
en la tierra como en el infierno, los elegidos para servir en la propagación de
las artes oscuras tienen motivos de sobra para inflamar sus ennegrecidos corazones con el lanzamiento del primer larga duración de los noruegos
Chaotian titulado “Effigies of Obsolescence”,un
discode contenidos arquetípicamente siniestros y de aura macro-cósmica que lapidan nuestra pobre condición de seres contingentes, porque las
meditaciones más trascendentales enmascaradas
en aquellos escritos turbios y profanos, endosan una certidumbre pesimista instalada
a perpetuidad, así lo demuestra "Gangrene Dream", que
interviene como intervalo entre la divinidad y la materia, el objetivo es
'trepanar' tu cráneo mientras se invoca a deidades ancestrales como Phobetor o
Koios quienes te levantarán de la vigilia para hacerte vivir alucinaciones realmente perversas.
"Effigies of Obsolescence" es el sumo conocimiento donde la
muerte es simultáneamente divina y eterna, las letras son vomitadas por Søren
Willatzen, quien parece maldicionar a la humanidad por dejarse redimir ante la
suciedad de la materia, en el aspecto instrumental resulta ser disonante sin
recurrir a modos exóticos ni extravagantes. "Adipocere Feast"
responde a las necesidades psicológicas de la variación, un tema veloz y tan certero
como el Armagedón, nuevamente nos toparemos con un trabajo
impecable de Søren Willatzen, quien lidera la guitarra solista y rítmica sin
tanto ademan de virtuosismo o refinamiento, con "Etched Shadows" se tiene
una insana crueldad adornada con el argumento de la imaginería recurrente. Luc
Lemay recordará su época de colegial con temas como este, su reinterpretación
intencionalmente cuadriculada a veces la hace incapaz de trascender a otras
esferas del nicho metalero, ¡pero al carajo!, la miel a veces no está hecha
para el hocico de los asnos, y este disco ha sido concebido para ser lugar de
grandes tormentos, como en “Fustuarium” que bajo el amparo de la oscuridad, o
bien de algún lugar escondido de la psique humana se vuelve un panteón de perversidades.
El epitafio donde se canibalizan las influencias
toma el nombre de "Festering Carcinolith", una impresionante
ascensión para los hijos del abismo, donde el metal de la muerte
sigue relacionado con el ocultismo y los símbolos mitológicos.
Pocos discos te harán sentir como un cadáver ante la turbia
atmósfera de diabólica fatalidad que emana de este "Effigies of
Obsolescence" de Chaotian, álbum necesario para recibir el fin de los
tiempos con retazos idílicos asquerosamente gore.
Bien dicen que el fin de un
referente allana todo un sendero de oportunidades para quienes rondan sus
pasos, sin importar la afinidad que puedan tener sus coetáneos o que tan
diferente sea el entorno donde ellos se desenvuelven, para la muchedumbre buscar
el reemplazo del héroe caído es una prioridad que se activa más por morbo que
por legítimo interés, y desde la tragedia de Trevor Strnad, cantante de la
banda estadounidense "The Black Dahlia Murder", sacar la cabeza por encima de la cornisa en búsqueda del próximo baluarte del NEW WAVE OF AMERICAN HEAVY METAL se ha vuelto una necesidad, aunque la posibilidad de que alguien funja de timonel este allí, latente y visible a simple vista. Si nos distanciamos un poco de las
estrictas locaciones geográficas para cubrir la mayor parte del territorio
norteamericano, veríamos a Canadá como un importante bastión lleno de nuevas y brillantes potencialidades, desde sus fronteras han salido bandas como Unbowed o los
furiosos The Last Felony quienes vienen sumando una seguidilla de comentarios positivos para su corta pero bien nutrida hoja de vida, no obstante; y sin lugar a dudas, quienes merecen mayor cobertura dada su inmejorable
posición para dar en el blanco con el certero dardo de la brutalidad tecnificada es
justamente TRUENT, banda procedente de Columbia Británica y portadora de lo que a título personal llamo"predisposición".
¿Qué tiene de diferente esta banda o que novedad
nos trae?, pues diría que tiene todo y nada al mismo tiempo, valgan verdades, cuentan con algo elemental en estos momentos, y es el acondicionamiento necesario para perfeccionarse e incorporar nuevos
conocimientos que les permitan destacar
por encima de su entorno. ¿Fundamentos para esta afirmación?, pues tenemos una elaboración
meticulosa en el trabajo lírico, que resulta una extensión desde la narración
mitológica de los “siete pecados capitales” estructurados en siete canciones más un tema instrumental de interludio que sumarian un total de ocho para este registro, musicalmente hablando es directo y tiene un amplio campo de acción reverberante, si bien no explora nada nuevo, esto no es impedimento para que se ejecución sea rápida e intuitiva, escuchas "Blood and Dust" e intuyes por defecto que las progresiones del movimiento serán el eje central no solo de la canción, sino de todo el disco, el ensamble jazzy de inicio, nudo y desenlace y el posterior recorrido musical te dan la sensación de bordear los extramuros de lo no habitual, esto mientras dura la canción, por que ni bien empieza "Usurper Of The Sky" se despliega conscientementeuna infinidad sucesiva de flashback pasados versionados en el aquí y ahora. ¿Suena demasiado moderno?, pues si, hay movimientos ondulantes, mucho groovy y una que otra voz limpia que lo hace marcadamente contrapuesto a su antecesor, con la llegada de "Silk and Bone" ya se habla de un lenguaje uniforme que se repite por segunda vez, y que busca retar viejos hábitos para
introducir otros nuevos, aunque lo llamativo vendría poco después con "The Last Hunt", aquí se nota a leguas que estos muchachos les prenden velas a los hermanos Björler todos los días antes de irse a dormir, por que han creado una replica exacta y vivida de los dos pormenores musicales mas representativos del dúo: At the gates y The haunted.
"This Verdant Coil" exuda
ese miasma del metal moderno que se extiende cómodamente para servir de
trampolín a los que gustan de movimientos saltarines, no me molesta pero tampoco me entusiasma,
más aun por que tras el breve instrumental de resonancia tribal llamado
"In The Mire", tenemos a trallazos como "Scathe Of Branches"
con una batería cubierta de una riqueza de capas que ayuda a la conjunción escalonada de estilos, las progresiones técnicas vuelven como en un inicio con brillantes matices como los del bajo y esa afinación tan peculiar que me recuerda al usado por Ryan Martinie en LD 50 de Mudvayne. "Damned To The Deep" esta mas allá de un destacable estilo sofisticado, como lo comenté al comienzo de esta reseña, cumple con un requisito fundamental, y es tener un espíritu altamente adecuado a las directrices de estos tiempo.
La sentencia es rotunda: "Through
The Vale of Earthly Torment" de Truent
abarca una amplia antología de riffs, dinamismo, progresión, modernidad y un
agudo sentido de comunión para estandarizar su contenido conceptual sin robarle ideas a nadie ni caer en la
mezcolanza. Disco recomendando para tener una noción de cómo se construyen las
nuevas tendencias en el metal actual.
Calificación: 8.9/10
Lista de Canciones:
01. Blood and Dust
02. Usurper of the Sky
03. Silk and Bone
04. The Last Hunt 05. This Verdant Coil 06. In the Mire 07 . Scathe of Branches 08 . Damned to the Deep
Para convencerse de que algo es bueno, mediocre o definitivamente malo solo basta con agudizar los sentidos y prestar laatención debida a lo que se tiene al frente, con mucha más razón si se trata de música, aquel vehículo que le pone molde a la sensibilidad dentro de esa urbe nerviosa que llamamos "cerebro". Si su expresión se desenvuelve
con tal espontaneidad que automáticamente activa tus sentidos, quiere decir que
ya no hay marcha atrás, habrás logrado unir todos los puntos en común que
logran una experiencia mucho más completa, ya no solo es agudizar el oído, de seguro ojearás las letras del disco que estas escuchando, poco después moverás la melena como un verdadero maniaco y
salivarás con ansias de acompañar tu experiencia auditiva con un buen sorbo de tu bebida alcohólica favorita,
no es algo fuera de lo común, en la mayoría de los casos es algo
natural en la vida del “metalero” promedio, esta sinestesia será entonces la mayor valoración personal que se puede obtener para realizar un juicio crítico y sobre todo sincero.
Esta vez nos dejaremos de formalidades para reseñar un disco editado en el 2021 y que por alguna extraña razónha llegado a la redacción de Dargedik justamente para sobresaltar algunos aspectos clave más allá de la propia percepción musical."This Darkness Feels Alive" es el nombre del segundo trabajo de Overtoun, banda Chilena que posee en sus filas a Yoav
Ruiz-Feingold como vocalista, un músico norteamericano radicado en Boston y que actualmente cumple también con el rol de bajista para los veteranos Atheist. Al parecer la aportación de Yoav ha impregnado de un enfoque multidisciplinar a la banda, dada la escuela ultra técnica en la que se desenvuelve. Si en el anterior álbum llamado "Centuries of Lies", al cual considero como una gema del metal extremo técnico, fue un fenómeno de “unión de sensaciones” fiel al estilo de Obscura o Beyond Creation, ahora tampoco se ahorran esfuerzos para continuar con su devenir musical, prescindiendo de algunos elementos, dosificando otros y añadiendo algunos nuevos que aportan matices de ritmos ondulantes que tan bien se acoplan al acompañamiento melódico.
Del saque nos topamos con "Underneath", canción que cuenta con la participación de Joe Stump, el mago de la
guitarra neoclásica, con ese estilo pulido que rápidamente se fragmenta al colisionar con el golpe de la carne contra el metal. El bajo cumple con la expectativa de tener un rol melódico como el de la guitarra, aunque a la batería se le escuche arrastrar un sonido residual que la hace sonar lejana, de todos modos la idealizada unidad se consigue con buen acierto. En "Humanity" se desarrolla en pocos minutos un
pensamiento basado en la reutilización de ideas basadas en los ochentas, con
esas guitarras armonizadas que sirven de puente para estrofas de acondicionamiento básico entre cada acorde y a una velocidad prolongada que estoy
seguro, encantará a los fans del thrash/death de la vieja escuela, muy en la linea de los primeros Pestilence.
"Alone" tiene una amplitud de componentes espectrales ya recurrentes en la discografía de la banda, con ese ambiente atmosférico sin distorsión por el cual la voz surca con calma antes de recibir a bocajarro la brutal estampida, la sección final es una comunión de metal y hardcore que te dejará sin aliento. "Awaken the Beast" es el tema definitivo con el cual los neófitos conocerán de donde vienen y por extensión hacia donde se dirigen estos maniacos, un tema con potencial para volverse clásico e intemporal. "White Wolf" es otra palmada en el hombro de los gigantes, una renovación del lenguaje de antaño ejecutado con tacto preciso para manejar armónicos menores disminuidos y acompasados por un groove letal.
"Toxin" es fiel a la desfragmentación
de referentes, solo la velocidad thrasher logra tener una continuidad sin
desorganizar su estructura, la cadencia de ritmos sigue siendo el elemento simbiótico
que rige el disco, en contrapunto "This Darkness Feels Alive" es una sucesión lógica hacia el cambio, dada la escalada de estímulos que
hemos recibido, con una amplitud milimétrica a todo nivel que incluye cuotas tanto melódicas, groove o progresivas, y que esta vez vira hacia las tierras baldías del stoner/doom metal. Siempre he pensado que un álbum no es del todo ecléctico si
no tiene un tema folk en su repertorio, y es que de eso se trata el arte, de
tener el poder de impresionar, de no dejar indiferente a quien está del otro
lado, y el instrumental “Araucaria” cumple con la regla, es como escuchar un
jamming entre Los Jaivas, Led Zepellin y Gentle Giant. Se da por terminado este álbum con "Made Manifest" y la participación especial de un viejo conocido de la banda: Awka Mondaka.
Nos encontramos con un disco de espíritu
conciliador que une con gran vitalidad diferentes tradiciones musicales, además de incluir una
fuerte identidad cultural y una multidimensionalidad que fascina e intriga al mismo
tiempo, imposible no estremecerse.
Calificación: 8.8/10
Lista de Canciones:
01. Underneath
02. Humanity
03. Alone
04. Awaken the Beast 05. White Wolf 06. Toxin 07 . Pitch-Black 08 . This Darkness Feels Alive
No hace falta ser un cínico adulador para reconocer cuando un trabajo musical se ha elaborado de un modo tan subversivo que raya en lo prodigioso, más aun cuando nace de un compositor con una inventiva voraz por construir su propio universo personal a través de un devenir constante de libertad creativa y por si fuera poco con ese vínculo medular para cargar el mismo a sus espaldas con la ejecución total de todos los instrumentos, porque para sacar adelante este tipo de tareas hace falta también de agallas; si es que lo quieres hacer bien, claro está. Justamente en las últimas semanas, Dargedik ha tenido el placer de repasar algunos de los más destacados proyectos solistas del medio, versiones definitivas firmadas bajo un solo nombre, y el día de hoy para nuestra suerte nos topamos con otro de esos insanos actos de determinación individual, esta vez a cargo de Cameron Boesch, multiinstrumentista, compositor y posible ínterin fugado del manicomio local, porque para realizar esto hace falta tener zafado un tornillo.
En primer lugar porque "Lucid Offering", cuarto álbum de Light Dweller, nombre con el que se le conoce al proyecto unipersonal de Boesch, manifiesta un carácter ecléctico y sustancialmente alejado del estilismo nórdico que caracterizaba su disco previo, ahora procura presentarnos una versión mas cercana al Death metal de disonancias insondables, razón por la cual su postura rítmica presenta tonos sumamente bajos, desesperantes y con una guturalidad salida de regiones abisales, como lo manifiesta "Succumb", envuelto en un clima de extrañeza y de una perplejidad casi sobrenatural, apartándose abismalmente de todo sentido armónico, este disco parece no solo emitir musicalidad, da la impresión de materializar también voces espectrales que no encuentran mejor escape que el estrepitoso armazón instrumental al cual se adhieren como pasantes de otro plano, manifestándose entre notas de guitarra totalmente fuera de tono y sopesadas por acordes desarmónicos. "Lucid Offering" no se mueve de esa esfera donde el desasosiego causa un temor sordo y pesado, aquí hay una urgencia por no llegar a ninguna parte que no sea la perturbación mental. "Conjurer of Light" es un tema de alto valor polivalente al rememorar los tiempos donde el death metal dejaría de lado los repetitivos "power chords" para experimentar con la discordancia, no obstante el tradicionalismo mantiene presencia en pequeñas transiciones dinámicas al estilo thrash metal de la vieja escuela.
"Incantation Upon a Withered Entity" tiene la capacidad de improvisar, de encontrar su propio camino y dirigirse a otros senderos en la ejecución de las tonalidad menores que acompañan esos aullidos que se tensan y desgarran al unísono, siguiendo cursos paralelos mientras la guitarra simultáneamente realiza un ruido de fondo que da soporte para la brutalidad técnica. "Kaleidoscope of Thorns" es como darle una mirada al abismo, un paneo caleidoscópico a los fenómenos que pueden alterar tu percepción, todo es tan abrumadoramente simétrico que los ñoños adoradores de la melodía palidecerán cual hoja marchita ante tremendo monolito, de igual manera no esta desprovisto de detalles, aunque altisonantes, son sutiles pero no por ello menos despiadados, la guitarra es hasta ahora el principal espolón que partirá por la mitad tu cerebro, seguido por una batería brusca y seca que reorienta sus acciones a la velocidad del chasquido. "Spiritual Eclipse" es una canción a la que sería injusto fijar una etiqueta, como todo gran final es muestra de originalidad, creativamente desarrollada con diferentes sensibilidades y diferentes percepciones que se juntaron con un espíritu combativo, la influencia Blacker regresa al 99% para este ocasión. Me resulta difícil callar las entonaciones que resuenan en mi mente después de escuchar este disco, dada su condición de multiinstrumentista, director, letrista, cantante y todo lo demás... Cameron Boesch ha demostrado ser un gran inconformista, y su visión de "Death metal" definitivamente resultará en una catarsis auditiva para quien aspire a encontrar alturas insuperables en cuanto a erudición técnica y crueldad espartana.
En retrospectiva, "Lucid Offering" demuestra la buena salud que posee la carrera de este músico norteamericano quien ha dado en el clavo con su reinterpretación de los claroscuros del ser humano, "Por que la oscuridad no existe y es en realidad ausencia de luz". Imposible no estremecerse con esta maravilla moderna que merece ser escuchada una y mil veces. A quien piense lo contrario que siga jugando al sabelotodo con escuetos e inconsistentes juicios críticos.
Calificación: 10/10
Lista de Canciones:
01. Succumb
02. Lucid Offering
03. Conjurer of Light
04. Incantation Upon a Withered Entity 05. Hominal 06. Kaleidoscope of Thorns 07 . Spiritual Eclipse